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lunes, 28 de diciembre de 2020

ALFONSO CRESPO RODAS, biógrafo boliviano


CRESPO RODAS, Alfonso
(La Paz, Bolivia, 1916 – Ginebra, Suiza, 2011).- Biógrafo.

Hizo estudios de derechos en la UMSA de La Paz. También se formó en economía en la Universidad de Princeton en los Estados Unidos. Asistió a la Guerra del Chaco en 1934 y fue secretario del Presidente Enrique Peñaranda. Hizo periodismo, terreno en que llegó a ser director de ‘La Razón’ (1944-1949). En 1949 fue contratado por la Organización Internacional del Trabajo, desempeñando funciones en Ginebra, México y Argentina. Ha publicado hasta 12 biografías.

En 1986, el prestigioso escritor e historiador Saturnino Rodrigo al referirse al reciente libro de Alfonso Crespo sobre Hernando Siles, escribió para un medio local: “Esta obra ha sido escrita por el biógrafo veraz y honrado Alfonso Crespo Rodas, autor de biografías magníficas como ‘Santa Cruz’, ‘Eva Perón viva o muerta’ y ‘Los Aramayo de Chichas’. En este su nuevo libro muestra su innata habilidad para interpretar la vida de sus personajes, llegar hasta los secretos vitales de su existencia y narrarlos con equidad, con simpatía y con sindéresis; pese a estas virtudes en la biografía de don Hernando Siles se percibe un efluvio sutil de ternura, pese a todos los propósitos, envuelve y perfuma la vida estupenda del gran Presidente”.

En noviembre de 1981, entrevistado por Mario Castro, Alfonso Crespo decía de su obra hasta aquel tiempo: “yo soy un hombre aficionado a las letras y a la historia, pero no me considero un profesional, es más bien el deseo de servir a mi patria en ese ángulo el que me ha inducido en diversas épocas de mi vida a pergeñar algunos libros que no tienen, sin falsa modestia, mayor trascendencia”.

LIBROS Biografía: Santa Cruz, el cóndor indio (sobre Andrés de Santa Cruz, 1944); Eva Perón, viva o muerta (1978); Manuel Isidoro Belzu: historia de un caudillo (1980); Los Aramayo de Chichas, tres generaciones de mineros bolivianos (1981); Guillermo Gutiérrez, cinco retratos de un hombre (1984); Hernando Siles, el poder y su angustia (1985); Hernán Siles Zuazo, el hombre de abril (1997); Enrique Hertzog, el Hidalgo Presidente (1997); Bánzer: el destino de un soldado (1999); Lydia. Una mujer en la historia (sobre Lydia Gueiler Tejada, 1999); Alfonso Gumucio Reyes. La pasión creadora (2005); Luis S. Crespo: vida y obra (2008).

 

FUENTES: S. Rodrigo, ‘Una biografía de Hernando Siles’, Presencia Literaria, 13.04.1986, 2; M. Castro, ‘Alfonso Crespo’, Lo que el viento no se llevó, 2013, 328-333; ‘Mary-Rose Tudeau Crespo, ‘In memorian: Alfonso Crespo Rodas’, Rev. Fuentes, Nro. 17, diciembre 2011

 

D.R. Copyright: Museo del Aparapita / Elías Blanco Mamani

domingo, 27 de diciembre de 2020

MARÍA TERESA QUISPE NINA, restauradora de arte y artista pintora boliviana


QUISPE NINA, María Teresa
(La Paz, El Alto, Bolivia, 1976).- Restauradora de obras de arte y artista pintora.

Estudió en la Escuela de Bellas Artes ‘Hernando Siles’ de La Paz (1997-2001), siguió su formación con artes gráficas en Escuela Superior ‘Don Bosco (2002), hasta lograr un Diplomado en Gestión Cultural de la Universidad Nuestra Señora de La Paz (2009). Ha trabajado en instituciones como el Centro ‘Gregoria Apaza’ de El Alto, y el Viceministerio de Culturas en La Paz. Paralelamente ha hecho un sin fin de cursos de capacitación en su área. Como artista pintora, expone sus obras desde el año 2001.

 

FUENTE: Hoja de vida de la artista (diciembre de 2019)

FOTO: Tomada del face de la artista.

D.R. Copyright: Museo del Aparapita / Elías Blanco Mamani

 

CESÁREO CAPRILES LÓPEZ, periodista y divulgador de ideas socialistas en Bolivia


CAPRILES LÓPEZ, Cesáreo
(Cochabamba, Bolivia, 1883 – 1950?).- Periodista y divulgador de ideas socialistas en Bolivia.

Fue el gestor de la revista semanal ‘Arte y Trabajo’ que circuló en la ciudad de Cochabamba desde el 27 de febrero de 1921 con un tiraje de 800 ejemplares y que desapareció, por pacifista, oponiéndose a la Guerra del Chaco en 1932.

Según reseña biográfica que hace José Antonio Arze de Cesáreo Capriles, el mismo perteneció a conocidas familias de Cochabamba, “Desde su adolescencia se manifestó como un luchador de izquierda –escribe Arze-, causando en consiguiente escándalo en su clase social. Ya hacia 1910, cuando ser ‘radical’ en Bolivia era una singular herejía, Capriles era conocido por su singular adhesión a las doctrinas acráticas de Tolstoy y Bakunin. Trabajó durante varios años en empresas mineras de Cochabamba y Oruro, como administrador, pulpero, etc., y se hizo proverbial por sus abnegadas defensas de los obreros de los socavones. En 1920 se instaló; mientras trabajaba como socio de una firma comercial, fundó con sus propios recursos la revista semanal ‘Arte y Trabajo’. Fue director de ella por algunos años; desde sus columnas escribió memorables artículos sobre cuestiones sociales y fue el más entusiasta propulsor de las corrientes progresistas que empezaron a perfilarse en la ciudad del Tunari en el período 1920-28, agrupando a los obreros e intelectuales que más destacado papel habrían de tomar en el movimiento socialista de los últimos treinta años”.

En párrafos siguientes José Antonio Arze hace la siguiente valoración de esta valiosa publicación dirigida por Cesáreo Capriles: “Arte y Trabajo –que le ocasionaba pérdidas pecuniarias asu director en cada número- era ante todo una tribuna del pensamiento de izquierda, pero dio también amplia acogida a otras expresiones ideológicas. Fueron colaboradores de sus páginas la poetisa Adela Zamudio, el financista Rafael Urquidi, el vate Gregorio Reynolds, el político Daniel Salamanca, el novelista Arturo Urquidi. Todos los intelectuales cochabambinos que se han hecho una reputación de escritores en las últimas tres décadas –Jesús Lara, Carlos Walter Urquidi, Augusto Guzmán, Carlos Montenegro, Los Unzueta, etc., etc,- hallaron en ‘Arte y Trabajo’ una acogida siempre auspiciosa para sus producciones. Y es que Capriles intentó hacer de su revista una verdadera palestra, donde pudiesen discutirse con plena libertad todos los credos filosóficos”.

Don Cesáreo Capriles desapareció del escenario público en mayo de 1950, algunos corren la historia de que se suicidó.

Por su lado el reconocido escritor y biógrafo Augusto Guzmán, en sus memorias tiene el siguiente recuerdo de Cesáreo Capriles: “personalidad muy curiosa y conflictiva para el medio pues era anarquista, ácrata neto. Así como hay beatos fanáticos éste era un hombre absolutamente intolerante en materia religiosa, pero de honradez acrisolada. Sostenía que los bienes nunca eran bienes bien habidos y provocaba la injusticia social. Pertenecía a una familia distinguida a la que tocó una considerable herencia que él se negó a recibir pues sus convicciones eran contrarias a la propiedad privada. Escribía solamente los editoriales de la revista –‘Arte y Trabajo’- con un gran valor. Su primer editorial provocó un gran escándalo pues se refirió al movimiento obrero todavía incipiente y a los cholos que entregaban a sus hijas por un vaso de chicha”.

 

FUENTES: J.A. Arze, Escritos literarios, 1981, 275-278; A. Guzmán, ‘Cesáreo Capriles’, Semana de Ultima Hora, 05.02.1995, 4

FOTO: Portada de la revista que dirigió Cesáreo Capriles.

D.R. Copyright: Museo del Aparapita / Elías Blanco Mamani