HUIDOBRO, Vicente (Santiago de Chile, 1893 – 1948).- Poeta.
Se trata de uno de los líricos más importantes de Chile, quien
integra junto a Gabriela Mistral, Pablo Neruda y Pablo de Rokha, “la tetrarquía poética chilena más importante
del este siglo (XX) y la de mayor influencia en la literatura latinoamericana
contemporánea”, a decir de Luis Navarrete Orta.
Es conocido en el medio boliviano no solamente por su calidad
literaria o porque el crítico literario nacional Eduardo Mitre haya publicado
un libro de análisis sobre su obra, sino por que es el autor de un artículo en
que aboga por una solución al problema marítimo de Bolivia al decir: “Creo y afirmo como chileno y como ser humano
que debemos entrar cuanto antes en conversación con Bolivia y que ambos países
deben y pueden resolver generosamente, fraternalmente este gran problema de la
salida al mar de la nación boliviana. /…/ La salida al mar de Bolivia está en
manos de Chile. Sería triste que Chile desoyera la voz de su vecino. Bolivia
necesita un puerto, para ella es cuestión vital, lo pide sin amenazas, sin
apelar a alianzas ocultas y maniobras tenebrosas, lo pide en juego limpio, caballerosamente…”.
El artículo en cuestión fue titulado ‘Un puerto a Bolivia’ y se
publicó originalmente en el diario ‘La Opinión’ de Santiago de Chile el 28 de diciembre
de 1938. El mismo ha sido rescatado y difundido en Bolivia a través periódicos
locales y de libros como los elaborados por Mariano Baptista Gumucio y Néstor
Taboada Terán, dos conocedores de la problemática chileno-boliviano. Huidobro
en el mismo artículo se muestra además americanista y humanista a la vez, así
de claro está en el siguiente párrafo: “En
esta enorme América de tan vastos horizontes debe imperar la generosidad y el
espíritu de conciliación como una ley, como la más hermosa de las leyes. En
nuestros grandes países despoblados las almas no pueden empequeñecer, tienen
que ensancharse o abrir las alas inmensas bajo el sol. Entre nosotros, los
americanos, no hay odios seculares que nos separen, ni siquiera diferencia de
idioma que dificulte la comprensión de nuestros espíritus. Entre nosotros debe
reinar la fraternidad, debe nacer una vez por todas, la verdadera fraternidad
humana y dar ese ejemplo al mundo. Ese sería nuestro más alto honor en la
historia del hombre”.
Dos notables estudiosos bolivianos se han referido a la obra de
Vicente Huidobro, el primero Eduardo Mitre, quien en 1980 publico el libro: Huidobro, hambre de espacio y sed de cielo.
Aunque ya en 1976 el mismo autor valoraba la obra de Huidobro en artículo
aparecido en ‘Presencia Literaria’, que dice en su primera parte: “Uno de los rasgos más notables en la obra de
Huidobro es la constante recurrencia tanto en los motivos como en el
vocabulario y las imágenes. En rigor, su obra que va de ‘El Espejo de agua’ a
‘Poemas árticos’ puede considerarse como un solo poema incesantemente reescrito
y enriquecido. Pero la riqueza de Huidobro no reside, como ciertamente la de un
Neruda en la diversidad material que registra el poema, sino, más bien, en las
innumerables combinaciones con que presenta y transmuta unos pocos materiales.
Este rasgo hace que la obra vaya creando su propio código, sus propios
supuestos a partir de los cuales se explica”.
En 1978 Mitre retoma el tema Huidobro en su libro Cinco momentos de la lírica hispanoamericana
en que define que la obra de Huidobro “representa
un punto culminante en la poesía de revelación”. Por su lado el crítico
literario Pedro Shimose registra a Vicente Huidobro en su Diccionario de Autores Iberoamericanos en los siguientes términos:
“Cronológicamente fue el primer poeta
hispánico cuya obra vanguardista alcanzó resonancia universal. Le disputa al
poeta francés Pierre Reverdy la paternidad del Creacionismo, movimiento
estético que postula la autonomía del hecho artístico, en oposición a la
naturaleza, y considera al poeta como ‘un pequeño Dios’. En una conferencia
pronunciada en 1916, en Buenos Aires, Huidobro sostuvo que ‘la primera
condición de un poeta es crear, la segunda crear y la tercera crear’, por lo
cual fue bautizado con el nombre de
poeta creacionista. Siguió las enseñanzas de Apollinaire en su defensa del arte
como creación absoluta, independiente de cualquier otra realidad. ‘Hacer un
poema como la naturaleza hace un árbol’, era su divisa”.
FUENTES: Mariano Baptista Gumucio, Chile-Bolivia. La agenda
inconclusa, 1999, 55-56; Eduardo Mitre, “La imagen de Vicente Huidobro”,
Presencia/Literaria, LP, 29.08.1976, p. 1; Eduardo Mitre, Cinco momentos de la
lírica hispanoamericana, 1978, 181-192; L. Navarrete, Diccionario Enciclopédico de las Letras de América Latina, t. 2,
Monte Avila Editores, 1995, 2378; Pedro Shimose, Diccionario de autores
iberoamericanos, 1982, 220
COPYRIGHT: Elías Blanco Mamani / Museo
del Aparapita
No hay comentarios:
Publicar un comentario