Asistió a la
Guerra del Pacífico (1879) y combatió en la Batalla del Alto de la Alianza. De regreso en
Bolivia, desarrolló una importante labor al haber recopilado y transcrito en un
álbum melodías indígenas de la parte altiplánica del país; en reconocimiento de
su trabajo ganó una Medalla de Oro en la Exposición Universal
realizado en París, Francia (1889).
En calidad de compositor, pertenecen a su autoría una
serie de cánticos, música religiosa y ritmos populares; algunos títulos son: Te Deum Anime (misa), San Francisco Xavier (meditación
musical), La noche fue un día, Recuerdo de mi madre.
Alfredo Guillén Pinto anotó sobre el autor en 1948: “Su admirable fecundidad musical y su
perfecto dominio del arte, le han permitido producir un abundante repertorio de
obras de variado género, siempre con éxito sobresaliente. Faltaría espacio para
la enumeración de ellas. Baste decir que allí hay música religiosa, música de
teatro, marchas militares, canciones escolares y populares, música de salón,
aires nativos, en fin, de todo. Pero lo indudable es que Molina destacó su
personalidad artística en los himnos patrióticos, terreno en el cual
posiblemente no ha sido aventajado por ningún compositor boliviano”.
Hizo arreglos al Himno Nacional de Bolivia compuesto por
Benedetto Vincenti y cuyo resultado final parece ser que es la versión que
conocemos hoy en día, según una versión para pianola de ‘Melodee Song Roll’ de
industria USA que no registra fecha.
LIBROS
Música: Elementos de
música (1895?); Importancia de la
música (1898); Recuerdo a la memoria
del ilustre maestro José Verdi (1901); Sangre
Boliviana (melodrama, 1904); Sangre
Boliviana (marcha patriótica, 1909); El
Himno Nacional (conferencia, 1913); Reseña
histórica de la música boliviana (s.f.).
Ref.-
A.
Guillén Pinto, “Breves semblanzas…”, LP IV Centenario: II, 387; Pabón, “Del
teatro…”, LP IV Centenario: II, 86; Alarcón, Diccionario, 394; Costa, Catálogo: I, 695;
Burgoa, Disco Fonográfico, 53; DHB, Diccionario Histórico: II, 262
FOTO.- Compartida por Cynthia Padilla en Facebook (junio 2015)
COPYRIGHT: Elías Blanco Mamani / Museo del Aparapita
Hola, quiero agradecerle señor Elías por este pedacito tan significativo para mi familia, mi padre el Dr. Alfonso Bolaños Molina hijo de la enfermera Hilda Molina hija de mi querido bis abuelo Francisco Molina a quien recordamos con mucho cariño.
ResponderEliminarQuisiera comentarle que mi pequeña hija Aria Naiobi Peñaranda Bolaños la tátara nieta de Francisco toca el violín desde pequeña y actualmente esta en su tercer año en el conservatorio plurinacional de Bolivia.La herencia se lleva en la sangre, y es un orgullo ser descendientes de tan brillante personaje.
reciba mis mas cordiales saludos. Dra. Luz Bolaños Lozano.
Gracias por su valoración. Un abrazo.
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