Abogado y profesor de humanidades, en sus inicios hizo
periodismo al dirigir ‘El Heraldo’ (1910-1913). Estuvo ligado a la vida
diplomática al desempeñarse como Cónsul de Bolivia en Liverpool, Inglaterra
(1913-1920). De retorno en Bolivia fue rector de la UMSS (1920).
A decir de Gustavo Adolfo Otero, “El novelista cochabambino realizó una obra especial, amalgamando el
ideal con la realidad. En esto reside su mayor interés y encanto, pues
satisface el doble deseo que tiene el espíritu de verdad y de ensueño”.
Un apunte de Enrique Finot llama la atención sobre la
similitud de la novela Marina con la de otro autor: “Sin mucho
esfuerzo se alcanza a ver en esta producción la influencia del Padre Coloma,
que se asomó al realismo y aún a naturalismo con las restricciones y pudicias
propias de su esta eclesiástico. Marina es una especie de Pequeñeces, con las
naturales diferencias en las aptitudes de cada autor. Pero se trata en
ambas novelas de la crítca de las
costumbres de cierta clase social…”.
Para Juan Siles Guevara, la novela Marina es una
de las cien obras capitales de la literatura boliviana, al calificarla de “Novela de transición del romanticismo al
naturalismo, escrita con uno de los lenguajes más castizos que se han producido
en Bolivia”.
En su cuento titulado ‘Canijo’, Oblitas narra: “Un ciego de nacimiento. La vida para él era
una sombra inmensa. Andaba con la cabeza
echada atrás y los brazos tendidos delante, como buscando una
infiltración de luz en esa caverna sombría, una claridad en esa noche sin
estrellas”.
LIBROS
Novela: Marina (1907).
Estudio: Antología Boliviana (1907); Al margen de nuestra literatura (1939).
Otros: Obras (1972).
Ref.-
Finot, Historia Literatura, 1964, 344; Costa, Catálogo: I, 747; Otero, Crestomatía, 111; Siles, Cien obras,
330
COPYRIGHT:
Elías Blanco Mamani
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